La deconstrucción del yo y la consciencia no-dual: hacia una comprensión profunda de la experiencia humana

El yo como constructo mutable

La percepción del yo no es homogénea. Las personas varían desde una identificación absoluta con el cuerpo, la mente y los roles sociales, hasta la vivencia del yo como algo insustancial e impermanente. Esta última perspectiva lleva a identificar la experiencia con una consciencia no personal, según describen tradiciones como el budismo, el vedanta advaita y el taoísmo.

Desde algunas ramas de la psicología humanista y transpersonal, también se considera que la consciencia no es un mero producto del cerebro, sino que integra dimensiones trascendentes de la experiencia humana.

¿Qué es la consciencia no-dual?

Se define como una cognición abierta y despierta que precede a la intención y a la conceptualización, y que unifica procesos mentales sin fragmentar el campo de experiencia en dualidades como sujeto y objeto. Es decir, se diluye la separación entre quien percibe, lo percibido y el acto de percibir, emergiendo como una única experiencia.

"El conocedor, lo conocido y el proceso de conocimiento son experimentados como una única experiencia." (Mills et al., 2018)

Herramientas para medir la deconstrucción del yo

Aunque no existe una escala que mida directamente este constructo, sí hay cuestionarios que abordan aspectos relevantes.

Nondual Embodiment Thematic Inventory (NETI)

Desarrollado por Butlein (2005), este cuestionario de 20 ítems evalúa desde ideas transpersonales hasta vivencias no-duales profundas. Las cualidades que mide incluyen:

• Compasión
• Autenticidad
• Gratitud
• Desidentificación del yo
• Capacidad de rendirse ante lo que no se puede cambiar

Se puntúa entre 20 y 100, y las cifras más altas indican mayor no-dualidad.

Nondual Awareness Dimensional Assessment (NADA)

Propone dos dimensiones: autotrascendencia y gozo, divididas en escalas de rasgo (NADA-T) y estado (NADA-S). Está vinculada a la práctica de mindfulness, siendo útil para evaluar cambios inmediatos tras la meditación.

Ego Dissolution Inventory (EDI)

Mide el grado en que el individuo experimenta la disolución del yo, sobre todo en contextos psicodélicos. Ítems como:

• “Experimenté la disolución de mi yo”
• “Me sentí uno con el universo”

reflejan esta percepción. No está centrado en la meditación, aunque aporta una visión complementaria.

Quiet Ego Scale

El “yo tranquilo” implica una autoidentidad menos defensiva y más compasiva, con cuatro dimensiones clave:

• Identidad inclusiva
• Toma de perspectiva
• Consciencia desapegada
• Crecimiento

Factores que facilitan la deconstrucción del yo

Existen tres cualidades mentales especialmente relevantes:

1. Metacognición

Capacidad de reconocer y regular los propios estados mentales, aceptando pensamientos como eventos transitorios. Se opone a la tendencia a identificarse con contenidos negativos, común en la depresión. Se mide con el MCQ-30, validado en español.

2. Descentramiento

También llamado decentering o metaconsciencia, permite observar pensamientos y emociones desde una postura imparcial, sin identificarse con ellos. Esto reduce la rumiación y la reactividad, favoreciendo el bienestar. Se mide con el Experiences Questionnaire (EQ).

3. No apego

Desde la tradición budista, es una forma de relación no rígida con la experiencia, sin aferramiento ni rechazo. Es uno de los elementos que mejor predice el bienestar psicológico. Se mide con la Nonattachment Scale.

“El no apego incrementa la flexibilidad psicológica, la compasión y reduce el egoísmo.” (Sahdra et al., 2011)

Distinciones clave entre descentramiento y no apego

• El descentramiento puede desarrollarse con ejercicios sencillos o terapia cognitiva.
• El no apego, en cambio, se relaciona casi exclusivamente con la práctica meditativa profunda y sostenida.
• En meditadores experimentados, se observa que el no apego se duplica durante retiros, mientras que el descentramiento permanece estable.

Ausencia de ilusión de influencia: un concepto emergente

La ilusión de influencia es el deseo de controlar el mundo, tanto externo como interno. Aunque se haya desarrollado aceptación y no apego, esta ilusión puede persistir.

La AAI (Ausencia de Ilusión de Influencia) surge cuando se reconoce que:

• La realidad no depende de nuestras preferencias
• El yo que desea influir es una construcción mental
• El deseo constante genera sufrimiento, lo que el budismo llama tanha

Este concepto profundiza la desidentificación con el yo y permite una aceptación más radical del presente.

La deconstrucción del yo no es una negación de la identidad, sino una transformación en la manera en que nos relacionamos con nosotros mismos y con la experiencia. A través de herramientas como la metacognición, el descentramiento y el no apego, y con escalas específicas como la NETI o la NADA, es posible aproximarnos a una comprensión más profunda del yo y su disolución.

En palabras del maestro Sri Nisargadatta Maharaj: “El mundo está en ti, no tú en el mundo.”

Esta frase resume de forma poética lo que la ciencia y la meditación empiezan a medir: la consciencia no-dual como una vía hacia una forma de estar más plena, menos reactiva y más conectada con la totalidad de la experiencia.

Del libro:

Vacuidad y no-dualidad: Meditacionespara deconstruir el "yo" – Javier García Campayo

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